La magistrada Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre descartó de manera categórica que vaya a dejar su actual puesto para asumir la titularidad de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Veracruz.
La jurista reiteró su compromiso con la magistratura que asumió el 1 de septiembre de este año, para la cual rindió protesta por un período de nueve años.
Su nombre surgió como una posible candidata luego de que el 25 de noviembre el Congreso del Estado aprobara una reforma constitucional que modifica el proceso de nombramiento y remoción del Fiscal.
La reforma constitucional, aprobada con 42 votos a favor, modificó el proceso para elegir al titular de la FGE:
El Ejecutivo (la gobernadora o gobernador) podrá enviar directamente una propuesta al Congreso.
El Congreso deberá aprobar o rechazar el nombramiento en cinco días hábiles, sin requerir mayoría calificada (una mayoría simple será suficiente).
El período del Fiscal se redefinió a cuatro años, con la posibilidad de una única ratificación para un máximo de ocho años.
Este es el segundo ajuste constitucional a la FGE desde su creación en 2015, bajo la administración de Javier Duarte, cuando se transformó la Procuraduría en Fiscalía.
