Por Ruperto
Ya ahora nos caen de repente
desde el cielo los chubascos
que aunque nos causan atascos
nos refrescan el ambiente,
pues cuando el día está caliente
y ya se empieza a nublar,
uno deja de sudar
el aire se siente rico
y uno queda fresquecito
cuando te sentías asar.
La calle se vuelve arroyo
y al llegar a la atarjea
la cosa se pone fea
porque está tapado el hoyo,
y lo que causa el embrollo
es tanta mugre y basura,
si se enseña a una criatura
a que se tire en el bote
ya no veremos que brote
la mugre por la abertura.
Yo ya saqué el impermeable
y por supuesto el paragua
pues me encojo con el agua
y ya no soy reciclable,
claro me veo miserable
húmedo y arrugadito,
me dicen cuidao viejito
no salgas a caminar
que te vas a resbalar
debía de usar bastoncito.
Tengo en el patio una tina
que me la llena la lluvia
y ahí sueño con que una rubia
en mis brazos alucina,
yo digo que es mi piscina
en la que entreno el buceo,
claro no da para el braceo
pero ahí nado de muertito
relajándome todito
y en la olimpiada me veo.
